viernes, mayo 18, 2012

Propiedades del Mani ...


El maní tiene propiedades beneficiosas para la salud
El consumo de 50 gramos de maní provee el 24 por ciento de las proteínas necesarias El maní un futo que crece en la tierra, tiene grandes propiedades beneficiosas para nuestra salud, por lo que se debe aprovechar en esta época que existe en abundancia en los mercados locales.

Científicos descubrieron que esta oleaginosa es buena para la salud por sus propiedades antioxidantes. Se asegura en la página web ladosis.com que contiene importantes vitaminas y minerales; 50 gramos aportan al organismo el 24% de las proteínas necesarias y reducen el colesterol en la sangre.

El maní o cacahuate posee tantas propiedades beneficiosas para la salud como la fresa. De acuerdo con un estudio realizado por científicos de la Universidad de Florida, en Estados Unidos, el maní es altamente rico en antioxidantes necesarios para proteger al organismo de padecimientos asociados a las enfermedades coronarias o al cáncer.

En cuanto a la presencia de antioxidantes, se indica que, el maní es tan beneficioso como la fresa, e incluso más que la zanahoria o la manzana, según el estudio. Además de antioxidantes (también presentes en otras frutas secas como nueces, almendras, y avellanas) el maní contiene altos niveles de proteínas y de grasas monoinsaturadas, que tienden a reducir el colesterol en la sangre.

Los resultados sorprendieron al grupo de investigadores. Los especialistas a cargo del equipo, expresaron: Esperábamos un alto contenido de antioxidantes en el maní, pero quedamos altamente sorprendidos cuando comprobamos que el nivel era similar al de frutas como la fresa.Con pequeñas cantidades de esta oleaginosa el organismo obtiene casi la mitad de las 13 vitaminas que requiere el organismo, como la E, B1, B2, B3 y B6. Los nutricionistas recomiendan consumir diariamente 50 gramos de maní, cantidad que aporta al organismo el 24% de las proteínas requeridas.

También contiene minerales muy importantes para el cuerpo. Entre los más significativos están el potasio, sodio, hierro, calcio, magnesio, flúor, zinc, cobre y selenio, porque colaboran en la conformación ósea, funciones del cerebro, formación de dientes sanos, y principalmente en la prevención de agentes anticancerígenos.

Vitaminas: Contiene vitaminas E, B1, B2, B3 y B6, además de folatos, fundamentales en la formación del tubo neural de los embriones.

Fibra: Mejora la digestión y reduce el colesterol que obstruye las venas y las arterias.

Minerales: Potasio, sodio, hierro, calcio, magnesio, flúor, zinc, cobre y selenio.

Grasas insaturadas: Ácido oleico y linoleico, benéficas para la salud cardiovascular y el funcionamiento del cerebro.

Los nutricionistas afirman que la carga proteica del maní produce sensación de saciedad, por lo que lo recomiendan en las dietas. Además, contiene grasas insaturadas que son fuente importante de vitaminas liposolubles.A su vez la riboflavina lo hace útil en los procesos de respiración de las células de la piel, las uñas y el cabello, y la niacina (vitamina B3) lo convierte en un ingrediente vital para el fortalecimiento muscular.

Esto sin contar que contiene vitamina A y E, por lo que se le atribuyen funciones antioxidantes y de regeneración celular.

El maní es una fuente indiscutible de minerales, en especial calcio, fósforo y magnesio, vitales para el crecimiento y desarrollo osteomuscular. Especialmente rico en fósforo, pues una porción de 50 gramos aporta el 13.6% del requerimiento diario de este mineral y también aporta hierro en un 100% de las necesidades diarias.

De ahí que se le considere una alternativa saludable para personas con anemia o convalecientes y para mujeres embarazadas.

Aunque no en gran proporción también contiene fibra (tres gramos por cada cien), importante para las funciones digestivas y el barrido del colesterol LDL (malo).
De su composición nutricional se puede concluir que el maní contribuye a la prevención de males como osteoporosis y los calambres, afirman los expertos.

Este alimento que crece en pequeñas vainas bajo la tierra (por eso se llama nuez de tierra) puede ser también un ingrediente regulador en la dieta de las personas con diabetes o hipoglicemia.

Puede también usarse en pacientes dislipidémicos, con desórdenes en los niveles de grasas y el colesterol aumentado.